martes, 19 de febrero de 2013

Agresión a Héctor Giner



Desde la UD BENICALAP queremos denunciar la brutal agresión sufrida por Héctor Giner Tarazona, un joven árbitro de 17 años que  ha perdido el bazo tras ser agredido por un jugador durante un partido de fútbol celebrado el pasado domingo en la localidad de Burjassot , Hector está ingresada en el hospital “Arnau de Vilanova”. La brutal agresión ocurrió durante un partido de Segunda Regional que enfrentaba al equipo de Los Silos CF y al Mislata UF B, equipo en el que jugaba el agresor que fue detenido. Durante el encuentro, el árbitro, Héctor Giner pitó una falta contraria al Mislata U.F. y el agresor mostró su disconformidad y le insultó. Al recibir una tarjeta roja y ser expulsado del partido, se lio a golpes con Héctor. El agresor le propinó un puñetazo y, ya en el suelo, le dio varias patadas. Hector fue trasladado rápidamente al hospital Arnau de Vilanova, donde tuvo que ser intervenido para extirparle el bazo. En este momento permanece ingresado y estable en el centro hospitalario. 
Héctor vecino de Benicalap, jugó desde niño en los dos clubes de Benicalap que tras su fusión es la actual UD Benicalap, el San Roque y posteriormente en el CF Benicalap, donde es recordado como un chico humilde, gran compañero, sencillo  y una persona con un enorme corazón. Sus antiguos compañeros se movilizaron  y la noticia se extendió a través de Twitter, despertando una corriente de indignación y convirtiéndose de inmediato en tendencia. #TotsAmbHéctor

Todos los que hemos compartido vestuario con Héctor  no damos crédito a los acontecimientos que han provocado  la agresión, se decidió por el arbitraje y abandonar su otra pasión, jugar al fútbol, por ser incompatible con el arbitraje.
Estos lamentables acontecimientos nos debe hacer reflexionar a todos  sobre la labor de los árbitros y valorar el comportamiento que tanto jugadores, entrenadores, directivos, padres y público en general se tiene con este colectivo que intenta hacer su trabajo lo mejor posible y casi nunca es reconocido.




¡¡¡ÁNIMO HÉCTOR!!!